Pulido de Hormigón

El pulido de hormigón es una de las técnicas con mayor auge en los últimos años, principalmente debido a sus múltiples ventajas. Mediante el proceso de pulido se obtiene una superficie muy brillante y resistente, y sobre todo de fácil mantenimiento. Se utiliza ampliamente en parkings y locales, pero cada vez se extiende más a otro tipo de entornos públicos, sobre todo para zonas en las que se vean sometidos a un mayor desgaste, como locales comerciales, espacios públicos, naves industriales, etc.

Después del proceso del pulido, estas superficies llegan a tener un brillo natural similar al del terrazo. Además, con este tratamiento se eliminan todas las posibles manchas, grietas, resaltes, etc.

El hormigón pulido puede presentar diversos acabados con colores, creando incluso formas geométricas y dibujos sobre el suelo como logotipos, etc. Es importante destacar que estas superficies no generan polvo, sino que por el contrario, el brillo obtenido transmite sensación de limpieza y amplitud.

El coste de mantenimiento es muy bajo, muy inferior al de otro tipo de superficies. Esto sumando a que debido a su gran resistencia tienen una larga vida útil, lo convierten en una opción muy interesante.

Abrillantado de suelos

El abrillantado o cristalizado es un proceso realizado para el embellecimiento del suelo, para darle brillo e iluminarlo. El resultado obtenido ofrece una mayor sensación de profundidad o amplitud ya que crea una sensación visual de espejo.

El proceso de abrillantado de un suelo depende del tipo de suelo y de lo dañado que esté. En general se realiza después del pulido, en suelos nuevos o bien suelos desgastados con el tiempo que han perdido el brillo. Si la superficie presenta manchas, rayas, grietas u otros daños, será necesario pulir primero y abrillantar posteriormente. Si el suelo no presenta daños pero ha perdido el brillo, se podría abrillantar directamente.

Los productos aplicados aislan la base del pavimento, tapan el poro, resaltan el brillo y lo protegen de la suciedad y los roces. Al sellar el poro, se impide a absorción de agua, aceites, grasas y otros productos que puedan manchar el terrazo o mármol. Estos productos forman una fina película de microcristales que es la que ofrece la sensación visual de espejo

Es importante saber que si solo se realiza un proceso de abrillantado el brillo obtenido durará menos que el brillo que se conseguiría si se realizase primero el pulido y luego el abrillantado. Esto es debido a que el pulido rebaja el suelo y saca su brillo natural. Sin embargo, con un mantenimiento adecuado el brillo puede durar años.

¿Qué es el pulido?

Según el diccionario pulir o pulimentar se refiere a alisar una superficie para que quede suave y brillante. Si nos centramos en el pulido de suelos deberíamos de añadir que también se busca eliminar todos los posibles desperfectos propios de la colocación del suelo o del desgaste por el paso del tiempo, como son los resaltes, agujeros, manchas, juntas abiertas o grietas.

Este proceso se realiza mediante una máquina de pulimento y con unas piedras o muelas especiales. Estas piedras están fabricadas con diamante, carborundo (material de gran dureza utilizado como abrasivo) y cemento. Se clasifican según la proporción que contienen de este material, lo que se deberá de tener muy en cuenta según el tipo de superficie a pulimentar (para evitar crear arañazos en la superficie).

De esta forma se realiza un proceso de pulido de entre 3 y 5 pasadas, empezando por piedras más bastas, hasta terminar con un proceso de afinado y abrillantado.

Cuantas más pasadas se den se obtendrá un brillo más natural y duradero. Es importante tener en cuenta que el tipo de suelo limita la cantidad de brillo que se puede conseguir. Por ejemplo, dependerá de si es mármol, terrazo o granito, y de la variedad de cada uno de ellos.

Si el suelo no presenta arañazos, manchas, rayas u otros daños, se puedo optar por hacer un leve pulido de rebaje para tapar el poro de la superficie y dar brillo. También puede darse únicamente una pasadacde pulido para tapar el poro y resaltar el brillo, pero el brillo obtenido será de una intensidad inferior y durará menos tiempo.

Consejos de limpieza para alfombras

Las alfombras son muy utilizadas como elemento decorativo, combinando perfectamente con suelos de mármol o terrazo. Además crean un ambiente más acogedor y confortable, y aportan calidez a tu hogar durante el invierno. Pero tienen como principal inconveniente la dificultad de limpieza, en este artículo te queremos ayudar dándote algunos consejos.

Es normal que una alfombra suelte pelusilla durante los primeros días de uso. Se deberá de eliminar a diario durante 15 o 20 días, barriendo con una escoba suave, y en la dirección del sentido del pelo. Después ya se puede utilizar el aspirador.

MANCHAS: NORMAS GENERALES

1. Evitar que se seque la mancha. Si es sólida o está seca, raspar y cepillar.
2. Probar el colorido en una esquina con el producto de limpieza. Si el mismo es sólido, aplicar el producto, frotando suavemente.
3. Aplicar después agua tibia.
4. Importante: secar a fondo.
5. Cepillar suavemente la zona que estuvo manchada.
6. Para el lavado integral de la alfombra acudir a profesionales especializados.

TIPOS DE MANCHAS	PRODUCTOS DE LIMPIEZA
Aceite, grasa, mantequilla, cera, crema, cosméticos, betún, alquitrán, tinta de bolígrafo.	Disolvente para limpieza en seco (alcohol, bencina, percloroetileno, etc.).
Café, té, leche, cacao, chocolate, helado, huevo, sangre, salsas, vómito.	1- Agua con detergente neutro y vinagre. 2- Disolvente para limpieza en seco.
Dulces, fruta, zumos, vinos, licores	Agua con detergente neutro y vinagre.
Chicle, rojo de labios, lápiz de color, pinturas, tinta lavable, orina, excrementos.	1- Disolvente para limpieza en seco. 2- Agua con detergente y vinagre. 3- Disolvente otra vez.
Barniz de uñas.	Acetona
Barro, una vez seco y raspado.	Agua con amoniaco

El granito en la historia

Es una roca ígnea muy dura, no calcárea, de aspecto cristalino y fácil pulimento, siendo la especie más amplia entre los minerales. Está formada a partir del enfriamiento lento, en profundidad y en grandes masas del magma. Está constituido esencialmente por cuarzo, feldespato y mica.

El granito se ha usado ampliamente en construcción desde la prehistoria gracias a su resistencia a la erosión. Podemos encontrar excelentes ejemplos de su utilización como elemento fundamental de la construcción. Hay que hacer notar que el pulido fino del granito era extremadamente difícil en la antigüedad, por lo que solía tener una apariencia tosca, incluso cuando estaba muy bien tallado.

En el Antiguo Egipto se usó este material con múltiples fines, desde la elaboración de vasijas u otros tipos de recipientes, hasta objetos más complejos como columnas, puertas, dinteles, e incluso obeliscos. También lo usaron en la construcción de cámaras funerarias (la Cámara del Rey de la Gran Pirámide de Guiza está construida con grandes bloques de granito), o para el revestimiento de algunas pirámides. Otro de los usos más importantes que le dieron fue para esculpir estatuas, como la que se ve en la imagen, pulida hasta un punto que asombra a los arqueólogos modernos que ignoran el procedimiento exacto utilizado.

En la actualidad el granito ha sido usado ampliamente como recubrimiento en edificios públicos y monumentos. Además de ser un material muy vistoso, permite el aislamiento evitando la humedad y la contaminación acústica del interior, mientras que favorece el ahorro de energía y el control climático. También está reemplazando al mármol como material de monumentos, ya que es mucho más duradero. El granito pulido es muy popular en cocinas debido a su alta durabilidad y cualidades estéticas. Una vez pulido, su escasa porosidad impide la absorción de cualquier liquido, por lo que es más fácil su limpieza. Además, debido a su gran dureza y resistencia, también es muy utilizado para pavimentar suelos que sean muy utilizados, sobre todo en zonas comunes, entradas de edificios, escaleras, edificios públicos, y en general, cualquier destino que requiera la calidad, la diversidad y las posibilidades que siempre ofrece el granito.

Historia del mármol

El mármol es una roca metamórfica, es decir, una roca formada a partir de otras rocas, principalmente rocas calizas. El resto de componentes que lo forman son los que dan la variedad de colores y definen sus características.

Su nombre proviene del término griego "marmarios" que significa "piedra de color blanco nieve e inmaculada superficie, resplandeciente y brillante". Haciendo valer a esta hermosa piedra no solo por su belleza sino también por su origen.

El mármol esta íntimamente ligado a la historia y cultura del hombre, desde sus orígenes, y durante milenios, se ha utilizado como elemento estructural y decorativo. Quizás uno de los primeros usos que se le dio fue en el periodo Neolítico para el desarrollo de herramientas o elementos ornamentales (brazaletes, cuentas de collar, etc.).

A partir de la antigua Grecia y durante el periodo romano pasó a utilizarse también en la elaboración de esculturas e inscripciones.

No fue hasta el sigo VI que empezó a ser tratado como un material técnico en la arquitectura griega. En el siglo VII su uso se extendió a Italia a través de Bizancio y alcanzó su gran difusión en el renacimiento. En el periodo barroco pasó a utilizarse también como un revestimiento.

Su uso en pavimentos data de la edad media, esto es debido a la gran evolución de las técnicas de extracción y transformación.

El mármol ha desarrollado el sentido productivo de la gente, que ha visto en el mineral una ocasión de trabajo y de crecimiento económico.

En la actualidad se utiliza principalmente en la construcción, decoración y escultura, con unas técnicas tan sofisticadas y perfectas que logran transformar un material tan rígido en un producto flexible y adaptable a todas las interpretaciones.

Historia del terrazo

El suelo de terrazo es un material de construcción que está compuesto por un aglomerado de cemento con trozos de piedra, habitualmente mármol. Debido a sus múltiples ventajas, como su elevada resistencia, durabilidad y bajo coste, es uno de los materiales más utilizados para el pavimento, tanto en interiores como en exteriores.

Si buscamos en el diccionario poco más podemos aprender, salvo que la palabra proviene del latín terracĕus, de tierra. Por lo que acudimos a Wikipedia, donde descubrimos que los suelos de terrazo se empezaron a utilizar en Venecia a mediados del siglo XV, como método para aprovechar los trozos sobrantes de la construcción de suelos de mármol. La palabra terrazo deriva de la palabra italiana "terrazza" —a su vez derivada del latín "terracĕus" (tierra)—, pues inicialmente estos suelos se emplearon para pavimentar las terrazas que rodeaban las viviendas de los obreros de la construcción.

En su composición original, el suelo de terrazo se componía simplemente de una base arcillosa sobre la que se vertían cascotes y guijarros de mármol. Posteriormente estos guijarros se pulieron para conseguir un pavimento más confortable. Finalmente, los trabajadores descubrieron que vertiendo leche de cabra, incluso una vez seca, el suelo adquiría un aspecto similar al del mármol.

En la actualidad los materiales utilizados siguen siendo muy similares. Se emplea el mármol, en ocasiones combinado con otros tipos de piedra, y como aglomerante el cemento, normalmente cemento blanco, aunque a veces es coloreado con pigmentos.

Lo que sí que se ha sustituido son los procesos rudimentarios de fabricación y por supuesto ya no se utiliza la leche de cabra, en su lugar se realiza el pulido y abrillantado profesional, con los que se consiguen mejoras espectaculares en apariencia.